CIDH expresa preocupación en el décimo aniversario de Ayotzinapa
La investigación enfrenta serios obstáculos y un llamado a mantener el diálogo
Al conmemorar diez años de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) manifestó su creciente inquietud por la paralización de la investigación y el retroceso en la institucionalidad creada para esclarecer estos hechos. En un comunicado, la CIDH subrayó la existencia de un pacto de silencio que dificulta la identificación de los responsables, así como la falta de colaboración por parte de algunas corporaciones de seguridad.
Aunque reconoció el compromiso de la próxima presidenta, Claudia Sheinbaum, para resolver el caso, la CIDH enfatizó la necesidad de un diálogo auténtico y transparente entre todas las partes involucradas, incluidas las familias de las víctimas y sus representantes legales. La CIDH también recordó que la medida cautelar 409/14, vigente desde 2014, exige al Estado mexicano aclarar el paradero de los normalistas y ofrecer asistencia a los sobrevivientes.
Avances y desafíos en la investigación
El trabajo del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), instalado por la CIDH, ha sido fundamental para reorientar las investigaciones, desmantelar la "verdad histórica" oficial y revelar la posible complicidad de agentes estatales en la desaparición. A pesar de algunos avances, como la identificación de fragmentos óseos de dos estudiantes y la apertura de nuevas carpetas de investigación, la CIDH instó a las autoridades a continuar sus esfuerzos para garantizar justicia.
La CIDH reiteró su compromiso de seguir apoyando a las familias en su búsqueda de verdad y justicia, y llamó a la sociedad y a las autoridades a colaborar en el esclarecimiento del caso. La Comisión también se comprometió a monitorear el cumplimiento de la medida cautelar y a ofrecer asistencia técnica a las autoridades mexicanas para avanzar en la investigación.


